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Tyler Morning Telegraph - Galdámez brings church planting, education experience to Grace Español

Here are two articles written by Emily Guevara ( Twitter: @TMTEmily)  on our background and on  Grace Español .   Tyler Morning Telegraph...

Saturday, July 28, 2018

Una Plegaria de Oración - Salmo 119:169-176 - Segunda Parte

El salmista ya ha rogado que Dios le escuche porque quiere estar cerca de Él, quiere su guía y ayuda. El también ya ha adorado a Dios se acuerdo a su Verdad y ahora pide ayuda a Dios.

3 ¡Ayúdame! vv. 173-175

A. ¡Tu estás listo para ayudarme porque te obedezco! v. 173
“Esté tu mano pronta para socorrerme,
Porque tus mandamientos he escogido.”

Sabemos que Dios no tiene manos humanas. Dios no las necesita. El es el Dios que puede salvar con su palabra y lo puede hacer rápidamente si Él quiere.

No pedimos que nos socorra porque lo merecemos. No pedimos que nos socorra porque somos buenos. Pedimos que nos socorra porque “escogemos” ser obedientes. Notemos que dice “escojo” lo cual es un acto de la voluntad. Es algo intencional, algo que he seleccionado.
Cada día tenemos la opción de escoger o no escoger ser obediente a Dios. Dios puede hacerlo todo, pero espera que NOSOTROS escojamos sus mandamientos y los obedezcamos.

Y aun esto debe de hacerse en dependencia a nuestro Señor Jesucristo. Juan 15:5 Es a través de Él que podemos escoger lo que es bueno. La frustración del apóstol Pablo era su carne pecaminosa Esta se opone a lo que Dios dice y nos quiere impulsar a hacer lo que es contrario a sus mandamientos. Es la misma lucha que todos tenemos todos los que hemos creído en Cristo. Es mi lucha diaria. Rom. 7:14-15, 18, 24, 25  Si no tienes esta lucha es posible que no eres creyente o estás viviendo en pecado.

Dios nos ayudará en nuestro deseo de vivir en obediencia a Él, pero debemos escoger ser obediente y clamar a Él. Cuando somos obediente podemos pedir correctamente y podemos estar seguros que Dios está listo para respondernos y concedernos nuestras peticiones.
Como dijo un autor, “Una onza de obediencia es más efectiva que toneladas de oración”.

El salmista no solo pide ayuda porque es obediente sino también porque su anhelo es la salvación completa de su vida y porque quiere deleitarse en la Palabra del Señor.

B. ¡Mi anhelo y deleite es tu Salvación y tu Palabra! v. 174
“He deseado tu salvación, oh Jehová,
Y tu ley es mi delicia.”

Un concepto que ya ha hablado el salmista. El salmista desea la salvación de Jehová. Quiere tener esa libertad completa. Es su deseo y anhelo ser salvo de todo lo que está en contra de su vida. Para nosotros es ser salvos de los deseos del mundo y los deseos de nuestra carne. Para nosotros hoy es esto y desear la transformación de nuestros cuerpos mortales en inmortales.
¿Pero para qué pedir salvación? Para deleitarnos en la ley del Señor.

El salmista afirma su deleite no en la salvación sino en la Palabra de Dios. Su deleite, no su regla de vida, no su obligación, sino su deleite. Esta es su delicia, lo que le da el gozo. Es la Palabra de Dios que le da satisfacción. Es por esta razón que pide salvación.
Recordemos que cuando pedimos que Dios no salve de algo no es para simplemente estar bien.
La Palabra de Dios debe ser nuestro deleite. Pidamos a Dios que esto sea una realidad en nuestras vidas y paremos de beber de la leche adulterada de este mundo, que dejemos los placeres temporales que tienen nuestras almas prisioneras y no nos permiten gozar su Palabra.

“Oh Señor danos tu pronta salvación
Pero más que todo la delicia hacia tu Palabra”
 Habiendo pedido ayuda porque es obediente y porque su deseo es la salvación completa de Dios en su vida y deleitarse en la Ley del Señor, el salmista termina reconociendo su necesidad como oveja del Señor.

4. ¡Tráeme a Ti! vv.176

A. ¡Quiero vivir para ti! v. 175
“Viva mi alma y te alabe,
Y tus juicios me ayuden.”

1. ¡Quiero Vivir!
El salmista es optimista diciendo que quiere vivir. El quiere que su alma viva. ¡Cuanto nos hace falta hoy esto! Para algunos de nosotros es más difícil.

2. ¡Quiero Vivir para Adorarte!

El catecismo de Westminster dice en la pregunta número 1: ¿Cuál es el fin principal del hombre? R. El fin principal del hombre es el de glorificar a Dios y gozar de él para siempre. Esta es la razón por la cual existimos. No hemos sido creados para vivir de la manera que nosotros queremos. No hemos sido creados por Dios para vivir buscando un significado en algo que nosotros queremos lograr. No hemos sido creados para vivir centrados en nosotros mismos. Fuimos creados para adorar al Dios que nos creo. 
Nuestro deseo debe ser el de vivir para adorarle y darle gloria con toda nuestra vida. ¡Que toda nuestra vida sea vivida para adorarle cada día de nuestra vida con todas nuestras acciones, voluntad, emociones y nuestros pensamientos.

3. ¡Quiero tu Ayuda!
Necesitamos la ayuda de Dios para vivir para Él. Necesitamos lo que Dios considera bueno o malo. Esto es necesario para vivir para Él.

B. ¡Mi confesión! v. 176a
“Yo anduve errante como oveja extraviada”

1. Te necesito Señor como oveja errante que soy.

La Biblia es clara que antes de conocer a Cristo éramos esa oveja perdida. Luke 15 En Isa. 53:6 nos dice que cada uno de nosotros siguió su propio camino. Cristo nos buscó y rescató a través de su muerte y resurrección. Desde ese momento decidimos que Él sería al pastor que seguiríamos. Pero esto no garantiza que siempre lo seguimos fielmente. Nuestra inclinación pecaminosa es seguir nuestro camino. El salmista lo admite, necesita del Señor cada momento como esas ovejas que andan errantes.
Quizás tu eres esa oveja hoy. Dios quiere que vengas a Él. Te busca y te llama a que vengas a su redil. ¡Ven a Él hoy!

2. Te necesito Señor como oveja extraviada

Debemos decir,
“Si es cierto que soy esa oveja tonta que muchas veces anda errante por culpa suya. Si es cierto que muchas veces soy esa oveja tonta que se extravía porque sigue el camino equivocado y debo admitir que te necesito Señor.”

Como ovejas tenemos un pastor bueno, supremo, que nos busca cuando nos descarriamos.

3. ¡Búscame como tu siervo que soy!
“Busca a tu siervo”
Recuerda que somos sus ovejas, pero tenemos una posición especial. Somos sus siervos. 

(BEC) Charles Bridges escribió: "No puedo dejar de suplicar, que, aunque soy un pródigo rebelde, todavía soy tu siervo, tu hijo. Todavía llevo la marca del niño de un interés en tu pacto. ... Permídme entonces permanecer humilde y bajo. Pero no que no olvide mi afirmación-lo que Él ha hecho por mí."

Somos aquellos que Dios ha llamado para que le sirvamos.
Si te has desviado y no le estás sirviendo, o si no le estás sirviendo es porque estás desviado ya que el plan de Dios para tu vida es que le sirvas con TODA tu vida. Tu amor hacia Él se expresa con tu servicio que da en su nombre.

Esto fue lo que hicimos en Oaxaca esta semana. Servimos a Cristo sirviendo a ovejas descarriadas que no le han conocido. Oramos para que Dios use nuestro servicio para mostrarles que Dios los ama y les está buscando y quiere que sean parte de su redil, así como nosotros lo somos.
Tu como siervo o sierva de Dios tienes esta misión de compartir el mensaje del Buen Pastor a otros.
La semana en Oaxaca me hizo reflexionar en cuanto nos falta en este trabajo. Como iglesia estamos dormidos, somos indiferentes y no estamos sirviéndole como sus misioneros. Pedía a Dios que nos despierte y nos demos cuenta que hemos sido llamados para anunciar el mensaje de rescate del Buen Pastor nuestro Señor Jesucristo.

Y recuerda que cuando lo hacemos es con la actitud de esa oveja que estaba perdida y que por la gracia de Dios hemos sido rescatados. No lo merecíamos, pero Dios en su soberana gracia nos rescató. No lugar para el orgullo personal o decidir quien o quienes “merecen” ser rescatados. ¡Eso lo decide Dios!


B. ¡Mi Compromiso! v. 176b
“Porque no me he olvidado de tus mandamientos.”
 Como siervos, reconociendo nuestra condición como oveja expresamos nuestro compromiso a ser obedientes al Señor. 

Hemos dedicado veintidós sermones para hablar de la maravilla de la Palabra de Dios. Hemos hablado mucho sobre la necesidad de valuaría como nada en nuestra vida. Hemos hablado de como debe ser el centro de nuestra vida porque es la revelación de Dios. Dios se revela a través de ella y nosotros le conocemos más y más a través de ella. Hemos hablado y estudiado sobre la importancia de la obediencia. Este es el elemento más fundamental de ser un seguidor de Cristo. El cristiano obediente no es una excepción, debe ser lo que todos debemos ser. La obediencia nos define como cristianos. La obediencia muestra nuestro amor a Cristo y a Dios Padre.
Llegamos al fin de este estudio. La pregunta para nosotros es, “¿Y ahora que? ¿Qué cambios debo hacer que no he hecho? ¿Cómo aplicaras o seguirás aplicando este salmo a tu vida?

¿Y tu? Toma unos minutos para meditar en tu mente y escribe una oración y tu compromiso.



Una Plegaria de Oración - Salmo 119:169-176 - Parte 1

A muchos de nosotros no nos gusta suplicar o hacer plegarias a nadie. El orgullo Hispano es muy típico en nuestra cultura. “Yo o ruego o suplico a nadie” decimos. ¡Que orgullo tan insolente! Esto debe cambiar en nuestra cultura.

¿Recuerdas algún momento de plegaria a Dios? Solamente lo hacemos delante de Dios solo cuando estamos en una situación precaria. Es entonces cuando clamamos noche y día. Pero después de esto todo sigue “normal”.

Hay culturas que son lo opuesto. Estas culturas son insistentes, suplican y ruegan como parte normal. Esta es la cultura hebrea de la que el salmista es parte.

Esta sección “tau” que corresponde a la letra “t” o “th” en nuestro idioma es la última sección de las veintidós del salmo 119.  Esta sección es una plegaria a Dios. Es una plegaria expresando clamor a Dios pidiendo entendimiento, discernimiento, y rescate. Además, expresa adoración a Dios, un deseo de ser atraído a Dios en forma de confesión, y un compromiso a la obediencia a la Palabra de Dios.

Dios dice que estas oraciones o plegarias de oración son las que Dios considera efectivas. Santiago 5:16 Son efectivas cuando viene de una persona justo como la que describe este salmo. Nosotros los que hemos creído en Cristo somos justos por Él y podemos ser efectivos en nuestras plegarias a Dios. Si, somos humanos con debilidades, pero así también lo fuero otros siervos de Dios que fueron efectivos en sus oraciones fervientes a Dios. Santiago 5:17-18
Miremos como debemos elevara plegarias a Dios. Lo haremos diciéndolos en forma de oración.

1.  ¡Escucha mi Oración! vv. 169-170

A. ¡Quiero estar cerca de Ti! v. 169a
“Llegue mi clamor delante de ti, oh Jehová”

Como creyentes sabemos que debemos orar o clamar a Dios ya que es un mandato. Sabiendo que es un mandato debería ser suficiente, pero parece que esto no es suficiente. Relegamos la oración a un nivel bajo en comparación a nuestras responsabilidades diarias.

¿Porqué clamar a Dios en oración? El salmista dice que es para estar cerca de Dios. Esa es la idea de este versículo. Ruega que su clamor, esa oración con intensidad llegue delante de Jehová. El espíritu de la plegaria es de uno que viene a presentar su sacrificio a Dios y pide que sea aceptado por Dios. No lo hace porque hay una urgencia que desea que Dios solucione inmediatamente. ¡No! El salmista clama porque desea estar cerca de Dios. Su súplica es lo mejor que tiene para ofrecer a Dios.

A través del sacrificio de Cristo podemos entrar hasta el trono de la gracia de Dios a través de nuestras suplicas sin necesidad de ningún sacrificio. El sacrificio ya lo hizo al morir en la cruz por nosotros. Cuando creemos en Él por la fe tenemos este acceso.  Dios nos escucha y nos responde. Heb. 4:16

Nuestro deseo debe ser que cada día deseemos estar cerca de Dios con nuestras plegarias. Debe ser una prioridad porque no hay nada mejor que llegar ante su presencia a través de ella. Es a través de ella que gozamos de su presencia y comunión.


B. ¡Dame discernimiento! v. 169b
“Dame entendimiento conforme a tu palabra.”

A través de la oración no solo pide estar cerca de Dios sino también pide el discernimiento de Dios. Parece extraño que pida esto en su oración después de pedir estar cerca de Dios. No debe ser extraño ya que el contexto de esta plegaria está es la Palabra de Dios, y es a través de ella que podemos obtener entendimiento.

En esencia lo que está pidiendo es que Dios le muestre lo que es bueno y malo, lo que es agradable a Dios, la manera de responder a las situaciones diarias de acuerdo a su Palabra. Esto debe ser nuestra plegaria cada día a Dios. Y debemos pedir entendimiento en TODO no solo en lo que nosotros consideramos importante. Nuestro caminar en Cristo no está basado en nuestra propia opinión, en nuestro propio conocimiento, en nuestra propia prudencia sino en su Palabra.

¿Porqué? Porque nuestra sabiduría no alcanza la sabiduría de Dios. 1 Cor. 1:20-25 Dios nos ha rescatado del pecado en su totalidad para que le sirvamos con la totalidad de nuestra persona dependiendo de Él cada día.

Esto es mi plegaria a Dios cada mañana. Ruego que Dios me de su entendimiento para poder sabe lo que Él desea que haga hoy. Hay muchas demandas diarias, pero no todas esas demandas son las que Dios quiere para mi. Debo pedir su entendimiento para determinar que es lo que Él quiere para mi.

¿Es esta tu plegaria de oración cada día o vives para tus deseos y planes? ¿Vives siguiendo tu propia sabiduría o dependiendo totalmente en la guía del Señor a través de su Palabra?

C. ¡Líbrame! v. 170
“Llegue mi oración delante de ti;
Líbrame conforme a tu dicho.”

La idea de este versículo es muy similar al anterior excepto que la intensidad no es la misma. Es interesante porque la oración hecha es para que Dios cumpla con sus promesas. Debería poseer más intensidad porque hay algo tangible que espera de Dios. Pero no es así. El salmista clama porque quiere estar delante de la presencia de Dios, pero ora para que Dios le sea fiel a lo que ha dicho que hará.
Esto requiere fe. Sin fe es imposible agradar a Dios dice la Escritura. Pero esta fe esta arraigada en lo que Dios ha dicho en su Palabra. Cuando nos acercamos a Él. pidiéndole algo debemos no solo pedir lo bueno sino pedir con fe.

Santiago nos dice que muchos de nosotros no recibimos la respuesta que pedimos a Dios porque le pedimos lo que no es bueno. Dios nunca te dará algo que no es conforme a su Palabra. No pierdas tu tiempo. No lo pidas a Dios que apruebe tus mentiras. No pidas a Dios que aprueba tu vida inmoral. No pidas a Dios que apruebe tu egoísmo. No pidas a Dios que apruebe tu lujuria. No pidas a Dios que apruebe tu codicia. Dios no te concederá lo malo. Dios te responderá a lo que es “conforme a su dicho”. Si pides lo malo no has entendido el porque te salvó el Señor.

Dios promete liberarte del pecado. Dios promete liberarte del maligno. Dios promete darte salvación completa. ¿Estás pidiendo esto cada día?

Esto lleva al salmista a adorar a Dios con un corazón lleno de gratitud.

2.   ¡TeAdoro! vv. 171-172

A. ¡Con mis labios por lo que me enseñas! v. 171
“Mis labios rebosarán alabanza
Cuando me enseñes tus estatutos.”

El salmista dice que sus labios expresaran alabanza a Dios no cuando reciba lo que él quiere sino cuando Dios le enseñe sus “estatutos”.
Dios quiere que de nuestros labios rebosen alabanzas y adoración basada en su verdad. Nuestro Señor dijo que los verdaderos adoradores de Dios lo hacen en “espíritu y en verdad”. Juan 4:24

La adoración de labios que no está basada en la verdad de Dios es anatema delante de Dios. Es igual a lo que los hijos de Aarón hicieron en Lev. 10:1-2
Prácticamente esto significa que, si vivimos en desobediencia a Dios y a su Palabra y le ofrecemos adoración, esta adoración es en vano. No sirve de nada.

Si no le has dado tu vida a Cristo tu adoración no será válida ya que no está de acuerdo a la verdad de Dios. Es cuando crees la verdad de que Cristo murió por ti, para salvarte, darte perdón, y crees por fe es que podrás adorar a Dios.

Cuando adoramos a Dios aquí todos como iglesia debe ser basado en la Verdad que Dios nos ha enseñado. Todo lo que sale de nuestra boca debe ser de acuerdo a lo que Dios ha dicho. Si nuestra vida no está “sincronizada” a su Palabra nuestra adoración es inútil y vana.
En estos días he estado usando algunas oraciones escritas en el libro de Oración Común. Estas se han usado a través de la historia de la iglesia. Estas oraciones son valiosas ya que son bíblicas. Sin embargo, el uso rutinario y maquinaria de ellas lleva a una adoración superficial de la cual debemos tener cuidado. Debemos adorar de acuerdo a la verdad de Dios, pero debe ser en “espíritu”. Nuestro espíritu debe ser guiado a la presencia de Dios a través de su verdad.

Siguiendo esta idea el salmista dice que adora conforme a la “palabra justa” de Dios.

B. ¡Con mi lengua por tu palabra justa! v. 172
“Hablará mi lengua tus dichos,
Porque todos tus mandamientos son justicia.”

La semana pasada Samuel habló sobre la Santa Cena. Esta es una de las maneras en que adoraos a Dios. La iglesia de Corinto celebraba esta ordenanza, pero no de acuerdo a los mandamientos justos del Señor. Lo estaban haciendo en “carne” pecaminosa. Pablo los corrige por esto. Dios los tuvo que disciplinar quitándoles la vida a algunos de ellos. Todo tiene su limite. Si no adoramos a Dios conforme a los mandatos justos de Dios corremos este mismo riesgo.

¿Cómo adorar a Dios, lo adoras conforme a su verdad justa? Tu hablar es un acto de adoración a Dios y cuando lo haces debe ser de acuerdo a sus mandamientos que son justicia. ¿Hablas de acuerdo a sus mandamientos justos o ni siquiera piensas en ello? 
El salmista ya ha rogado que Dios le escuche porque quiere estar cerca de Él, quiere su guía y ayuda. El también ya ha adorado a Dios se acuerdo a su Verdad y ahora pide ayuda a Dios. De esto se trata la siguiente entrada.


Una Plegaria de Oración - Salmo 119.169_176

Esta sección “tau” que corresponde a la letra “t” o “th” en nuestro idioma es la última sección de las veintidós del salmo 119.  Esta sección es una plegaria a Dios. Es una plegaria expresando clamor a Dios pidiendo entendimiento, discernimiento, y rescate. Además, expresa adoración a Dios, un deseo de ser atraído a Dios en forma de confesión, y un compromiso a la obediencia a la Palabra de Dios.

Dios dice que estas oraciones o plegarias de oración son las que Dios considera efectivas. Santiago 5:16 Son efectivas cuando viene de una persona justo como la que describe este salmo. Nosotros los que hemos creído en Cristo somos justos por Él y podemos ser efectivos en nuestras plegarias a Dios. Si, somos humanos con debilidades, pero así también lo fuero otros siervos de Dios que fueron efectivos en sus oraciones fervientes a Dios. Santiago 5:17-18
Miremos como debemos elevara plegarias a Dios. Lo haremos diciéndolos en forma de oración.






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Wednesday, July 11, 2018

El Amor de mi VIda - Salmo 119:161-168 - Segunda Parte

2.  Tiene una vida constante vv. 164-166

La constancia en la vida es importante ya que produce resultados. Esto lo vemos en las personas que se dedican a algo por mucho tiempo. Obviamente, la constancia cuando va acompañada con el deseo de mejorar produce buenos resultados. Uno puede ser constante en lo malo y producir los mismos resultados malos.

El salmista habla en estos siguientes versículos del que ama la Palabra de Dios. Este demuestra una constancia en varias cosas:

A. Constante en la Adoración y Alabanza a Dios por su Palabra v. 164

“Siete veces al día te alabo
A causa de tus justos juicios.”

La vida constante del salmista tiene como distintiva la adoración y la alabanza a Dios. Cuando dice que siete veces al día alaba no quiere decir que es una rutina. Lo que está diciendo que es algo que hace constantemente. Es cierto que hay que tener un tiempo asignado para nuestro tiempo con Dios pero esto no es todo. Nuestra vida, en cada momento debe adorar y alabar al Señor. Y esto no quiere decir cantar cantos.

El salmista vive lo que el Salmo 34:1 dice, “Bendeciré a Jehová en todo tiempo; su alabanza estará continúe en mi boca.”
¿Porqué debemos ser constantes en la adoración y la alabanza? Porque demuestra nuestra gratitud a Dios. Muestra que no importa en que situación estemos sabemos que la gracia que hemos recibido del Dios a través de Cristo es tan abundante que produce agradecimiento en nuestra vida. Hebreos 13:5-6 nos dice que debemos estar contentos y expresar a Dios esta gratitud porque el Señor está con nosotros.

¿Conoces a alguien que se queja por todo? Esta persona muestra que no es agradecida. No reconoce que hay mucho más porque dar gracias a Dios.
Si amas la Palabra de Dios, tu vida demostrará constante alabanza y adoración a Dios. Además hay algo más profundo. Hay

B. Completa Paz Amando la Palabra de Dios v. 165
“Mucha paz tienen los que aman tu ley,
Y no hay para ellos tropiezo.”

La idea de la palabra “mucha” quiere decir que es completa. Hay una paz completa para los que aman la Palabra de Dios y son constantes en ella. Isaiah 26:3 nos dice esto. “Al de firme propósito guardarás en perfecta paz, porque en ti confía.”

¿Porqué? Porque ya lo hemos visto ves tras ves en este salmo. La Palabra de Dios es segura. No hay nada que Dios ha prometido que fallará. Si creemos que el hizo todo el universo con su palabra, ¿porqué no creer que todo lo que nos ha prometido se cumplirá?

Rom. 15:13 nos dice que Dios mismo nos dará su gozo y paz a través del creer por medio del poder del Espíritu Santo. ¿Creer en que? Creer en su Palabra. Esto proviene de nuestro amor a ella.

El resultado de amar la Palabra de Dios es que el creyente no tropezara en su fe.

 ¿Porqué hay tantos cristianos deprimidos, vencidos, inconstantes, mediocres, cayendo en todo tipo de pecado? Porque no se han afianzado a la Palabra de Dios. No aman la Palabra de Dios. Aman sus deseos, aman sus sueños, aman sus planes, aman sus trabajos, aman la diversión pero no aman la Palabra de Dios.

Si amamos la Palabra de Dios nunca tropezaremos. Tropezamos cuando dejamos la Palabra de Dios.
¿Quieres vivir una vida constante, fiel en Cristo? ¿Quieres tener completa paz? Ama constantemente la Palabra de Dios.
Una vida de adoración constante a Dios muestra gratitud.
Una vida de constante amor hacia la Palabra tiene completa paz.
Una vida constante que ama la Palabra también tiene

C. Completa Fe (obediente) en la Promesa de Salvación  v. 166

“Tu salvación he esperado, oh Jehová,
Y tus mandamientos he puesto por obra. “

En este versículo miramos una fe obediente que espera la salvación del Señor. La esperanza no es algo ilusorio y pasivo. Es algo al cual nos aferramos a medida que ponemos por obra lo que Dios nos ha mandado.  Heb. 6:18-19

Una vida que ama la Palabra tiene un corazón constante que demuestra constantemente reverencia y que atesora la Palabra, y que ama su verdad.
Una vida que ama la Palabra tiene una vida constante en la adoración y alabanza a Dios, tiene completa paz en su verdad y tiene completa fe en sus promesas. Finalmente, una vida que ama la Palabra de Dios:

3. Tiene obediencia constante vv. 167-168

Esta obediencia constante,
A.  Determinación para guardar y amar la Palabra de Dios v. 167
“Mi alma ha guardado tus testimonios,
Y los he amado en gran manera.”

Hemos hablado bastante en esta serie sobre el ser obediente a la Palabra de Dios. La semana pasada miramos como amor a la Palabra equivale a amor a Cristo. Ser obediente a la Palabra es ser obediente a Dios.  El amor hacia Dios se mide en la obediencia que tiene a su Palabra. 

¿Qué desea lograr Dios con una iglesia que es constantemente obediente? Creo que es lo mismo que les dijo al Pueblo de Israel en Éxodo 19:5 (Ex. 19:5), seremos un “especial tesoro entre todos los pueblos”. Dios quiere mostrar su grandeza a través de nosotros pero no sucederá hasta que no tengamos una obediencia constante en nuestras vidas.
Para esto necesitamos tener determinación. Miramos porque el salmista dice que ha amado su Palabra “en gran manera”. Esto implica determinación. Determinación implica hacer a un lado la mediocridad, hacer las cosas a medias o al “hay se va”. Esto no es bíblico. Dios es un Dios de excelencia y lo vemos en como se compromete con nosotros. Todo lo que Él hace es perfecto.

Tenemos que aprender a tener determinación. Queremos ver esto en tu vida en todo lo que haces tanto en la iglesia como en toda tu vida. Si dice que vendrás a un estudio o una activad ven a tiempo, haz con excelencia lo que debes de hacer. Igual en tu trabajo, en la escuela, en tu comunidad. Que tu vida muestre la determinación que tienes en Dios a través de su Palabra.
No quiero escuchar tus excusas. Detesto las excusas.

Pero esta determinación debe ir acompañada con

B. Firme obediencia a la Palabra de Dios en Todo los que Somos y Hacemos v. 168

“He guardado tus mandamientos y tus testimonios,
Porque todos mis caminos están delante de ti.”

Para el salmista no es porque Dios lo ve que es obediente. El sabe esto. Dios sabe todo nuestro camino, todo lo que somos en todo momento. (Ps. 1:6; 139:1-3) Salmos 1:6; 139:1-3
El salmista obedece porque ama la Palabra y le dice a “Dios lo hago y tu lo puedes ver. Tu ya lo sabes todo, no tengo que decirte.”
El estaba firme en su obediencia a la Palabra en todo lo que era y hacía y así debe ser con nosotros.

¿Cuál es el amor de tu vida? Cristo dijo que no podemos amar a dos señores (Mateo 6:24) o amares a uno y odiará al otro. En otras palabras, si el amor nuestro no es la Palabra de Dios, por la cual Él mismo se revela a nosotros, algo más lo será. Es así de sencillo. A estos se les llama ídolos. Aquellas cosas que toman el lugar de Dios, que son primero en nuestros valores. Son aquellos a quienes les damos lo mejor y el mayor tiempo.

¿Cuáles son esos ídolos? En la nueva serie que estudiaremos más detalladamente “Diez mandamientos” que nosotros tenemos para nuestras vidas. Miraremos como nos afectan en nuestra vida espiritual. Algunos de estos ídolos son:

1. YO - El centro de mi vida soy yo. Todo está centrado en lo que yo quiero, mi felicidad, mis sueños, mis anhelos, mi educación, mi vocación.

2. Familia (tu cónyuge) - Todo se centra en nuestra familia. Nuestra identidad se deriva de ellos. Queremos darles todo lo que nosotros no recibimos. El enfoque es que ellos sean felices.

3. Trabajo - Todo se centra en ser el mejor empleado, tener éxito o ganar más dinero. Queremos el reconocimiento en nuestro trabajo.

4. Dinero - Todo se centra en tener más y más dinero. Tener suficiente ahorrado para sentirnos seguros.

5. Placer - El placer sexual o cualquier otra cosa que te trae placer. Quizás son la dependencia química a algunos tipos de drogas, o al alcohol.  Tu constante enfoque son estos, no puedes vivir sin esa satisfacción porque te trae placer, te da la llenura que careces en tu vida. Te sirve para esconder tus inseguridades y dolor.

6. La Cultura -“La bestia”
Esta es una combinación y mescla de todo lo anterior.

“Por tanto, es imprescindible que veamos claramente cómo la bestia amenaza a la iglesia y absorbe a los cristianos en nuestros días. Como escribió Os Guiness, la combinación del capitalismo, la tecnología, y las comunicaciones modernas ha formado la civilización más poderosa de todos los tiempos; es decir, una cultura global». La misma representa a la bestia que amenaza con tragarnos en esta época. Los valores principales de la bestia en el siglo veintiuno salen de las computadoras, las carteleras, los televisores, los DVDs, la música, la escuela, los periódicos, las revistas y los iPods. La bestia nos dice:
• la felicidad está en tener cosas;
• debes conseguir para ti todo lo que puedas, y lo antes posible;
• la seguridad la dan el dinero, el poder, una excelente posición social y la buena salud;
• sobre todo, en la vida debes buscar el mayor placer, comodidad y bienestar que puedas;
• Dios no es importante en nuestra vida;
• el cristianismo es solo una de las muchas alternativas espirituales;
• no existen los valores morales absolutos; lo que esté bien para ti, esa es la verdad;
• no eres responsable ante nadie más que ante ti mismo;
• la vida en la tierra es todo lo que existe.

Scazzero, Peter. Espiritualidad emocionalmente sana: Es imposible tener madurez espiritual si somos inmaduros emocionalmente (Emotionally Healthy Spirituality) (Spanish Edition) (pp. 42-43). Vida. Kindle Edition.

Estos son los ídolos que toman el lugar de la Palabra de Dios. ¿Pero porque los preferimos en vez de preferir su Palabra que es la voluntad de Dios? El autor Peter Scazzero dice,

“Tenemos temor de que se haga la voluntad de Dios, porque no podremos controlar lo que haremos, cuándo lo haremos, cómo lo haremos, ni cuáles serán las consecuencias. La voluntad de Dios requiere entrega y confianza, y esto es algo que francamente, no estamos dispuestos a ofrecer.”

Scazzero, Peter. Espiritualidad emocionalmente sana: Es imposible tener madurez espiritual si somos inmaduros emocionalmente (Emotionally Healthy Spirituality) (Spanish Edition) (pp. 43-44). Vida. Kindle Edition.

Hoy Dios te pide que traigas tus ídolos delante de Él y los rompas, que los quites de tu vida. El te pide que el amor de tu vida sea su Palabra que proviene de su boca. Ella te dará a tener un corazón constante, un vida constante y obediencia constante haciéndote un creyente que a Dios porque ama su Palabra.


El Amor de mi vida - Salmo 119:161-168 - Primera parte

En esta sección comienza con las dos letras “shin” que corresponde a las letras “sh” juntas y la letra “sin” que corresponde a la letra “s”.  Los versículos 161-162 y 166 comienzan con la letra “sin” y el resto de los versículos con la letra “shin”.

El salmista nos muestra tres características de una persona que ama la Palabra de Dios. Esta sección esta llena de emoción. El salmista expresa las emociones de su corazón: se regocija (v. 162), ama la Palabra (v. 163), alaba a Dios (v. 164), tiene paz (v. 165) y tiene esperanza (v. 166).

El amor hacia la Palabra de Dios tiene tres características.

1. Tiene un corazón constante vv. 161-163

A. Es un Corazón Reverente a la Palabra de Dios v. 161
El salmista se halla una vez más perseguido por otros. En este caso aquellos que están en autoridad. Sin embargo, no tiene temor. Su temor no es hacia estos hombres.

Su reverencia, su asombro viene de su corazón viene de la Palabra del Señor. A través de este salmo hemos podido ver su constancia hacia la Palabra del Señor sin importar la situación en la que se encuentra.

¡Cuanto nos falta esto a nosotros como creyentes!
El martes me preguntaba la hermana Doreen cuál es la estrategia para ayudar a la iglesia a ser comprometida. La respuesta que le di es que yo no puedo cambiar a las personas, solo Dios puede hacer esto. Pero si podemos en nuestros grupos misionales y en el discipulado ayudarnos a mantener la constancia. Esto es clave.

Dios no creo la iglesia (no es el edificio) para solo los domingos. Dios creo la iglesia para que sus hijos tengan una familia en la cual puedan ayudarse mutuamente al amor, a las buenas obras, a la fidelidad, a vivir con un corazón reverente a Él y su Palabra. No hay tal cosa como un cristiano huérfano.
¡Jamás podrás vivir una vida fiel a Cristo tu solo! ¡Deja las excusas de que tienes!

¿Cómo tener este tipo de asombro, de estar maravillado de la Palabra de Dios? Esto lo hablábamos con el equipo pastoral. Les compartía el tiempo que pasé en mi vida en el cual tenía mi tiempo con Dios mecánicamente. Pero pasé por un tiempo de prueba y cuando el Señor me trajo una vez más a Él, me abrió los ojos. Su Palabra me hablaba a mí. Esto es el caso hoy. ¿Cómo tener esta clase de asombro y maravilla hacia su Palabra?

Pensamos en varias cosas:

1. Ser intencional en nuestra búsqueda de la Palabra de Dios. 
Esto implica tener tiempo designado para pasar tiempo con el Señor a través de su Palabra y la oración. El propósito de este tiempo es conocer a Cristo y a nuestro Padre celestial. Esto es lo que haremos en la eternidad así que debe ser un gozo pasar este tiempo. Es un tiempo para rogarle que nos muestre lo que quiere para nosotros que estamos en misión para su gloria. Debemos rogarle que nos muestre donde está Él obrando para que nosotros podamos tomar parte de ello.

2. Pedir al Señor que nos muestre sus maravillas.
No debemos dejar que esto se vuelva en un tiempo rutinario, un hábito mecánico. Debemos rogar que nos ilumine a través de su Palabra, que nos de su sabiduría, que nos enseñe más acerca de Él.

3. Debemos mirar todo a través de la cruz de Cristo. 
Pensemos en todo lo que nuestro Señor hizo por nosotros, como vivió una vida sufrida, murió y resucitó para darnos su perdón y llevarnos a Dios. Nuestro Señor es nuestro ejemplo para vivir una vida que agrada a Dios. Heb. 12:2-3 No olvidemos de predicarnos el evangelio cada día. Esto nos mantendrá agradecidos a Él, buscando su gracia diaria para vivir.

Si lo has intentado todo pero tu vida esta estancada, pide pruebas a Dios. El te las dará para que puedas crecer.

La persona que ama la Palabra del Señor tiene un corazón constante en la reverencia, en el asombro hacia la Palabra de Dios. También,

B. Es un Corazón que Atesora la Palabra de Dios v. 162
“Me regocijo en tu palabra
Como el que halla muchos despojos.”

El corazón constante es uno que verdaderamente se regocija en su Palabra. “Regocijo” es un participio en el Hebreo que indica algo continuo que no cambia.

Esto es lo opuesto de pensar que lo que Dios dice es algo pesado. 1 Juan 5:3 Si piensas esto es porque no entiendes la gracia de Dios.

Para el salmista este regocijo es como el que halla muchos despojos. Para nosotros no es claro esto. En este entonces, después de ganar una batalla, los ganadores se llevaban lo que poseía la otra nación. Esto era una señal de triunfo.
Para nosotros es como el que encuentra un tesoro.
Regocijarse en su Palabra es regocijarse en Dios mismo. Si Dios no te satisface, nada lo hará.  Si Dios no es tu tesoro, jamás encontrarás la verdadera satisfacción y propósito para tu vida. Esto lo descubrió Salomón y por eso escribió en Eclesiastés 1:2, “Todo es vanidad”.

La respuesta a esto es deleitarte en Dios.
El salmo 37:4 dice, “Deléitate asimismo en Jehová,
Y él te concederá las peticiones de tu corazón.”
Lo que significa es que cuando nos deleitamos en su Palabra nos deleitamos en Dios. Cuando estar con Dios es nuestro deleite nuestra vida es cambiada. Nuestros deseos cambian. Nuestros deseos se vuelven sus deseos. Esto es lo que significa buscar su reino y su justicia (Mateo 6:33). Y es cuando Dios se deleita en darnos lo que pedimos porque pedimos de acuerdo a su voluntad.

Cristo te ofrece de sí mismo esta mañana. En Juan 4:14 el dijo:

“mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.”
Esta agua que da vida es la única que puede satisfacerte.

La persona que ama la Palabra del Señor tiene un corazón constante en la reverencia, en el asombro hacia la Palabra de Dios, en la Palabra como su tesoro y también

C. Es un Corazón que Ama la Enseñanza de la Palabra de Dios v. 163

“La mentira aborrezco y abomino;
Tu ley amo.”

Miramos aquí el contraste de lo que el salmista odia, aborrece y abomina. Es la mentira, todo lo que no es de acuerdo a la verdad de Dios.
Fue la mentira que llevó a la condenación de la humanidad en el Huerto del Edén. La mentira que viene del padre de mentira Satanás.  Es la mentira que opera mucho en nuestros mundo en la cual  muchos de nosotros caemos como creyentes porque no buscamos la verdad de Dios.
¿Aborreces la mentira porque sabes que es contraria a la verdad de Dios?

El salmista  ama la enseñanza del Señor. 

El que ama a la Palabra es tiene un corazón constante en reverencia a la Palabra, la atesora en su corazón, y ama la enseñanza de ella.

¿Si alguien te pregunta si amas la verdad de Dios, qué evidencia le darías? Debería ser muy obvio. No solo es cuanto te dedicas a ella, sino como tu vida diaria refleja lo que ella dice. Tu vida debe mostrar evidencia práctica de que amas la Palabra de Dios.


La Palabra Segura de Dios - Salmo 119:153-156 - Segunda Parte

¿Cómo nos da seguridad la Palabra de Dios?

2. La Palabra Segura de Dios Revela su Compasión Abundante vv. 156-158

A. Su Compasión Abundante nos Vivifica v. 156
“ Muchas son tus misericordias, oh Jehová;
Vivifícame conforme a tus juicios.”

El salmista sigue el tema de como la Palabra de Dios revela su compasión abundante. Usando la palabra “mucha” nos muestra la compasión o misericordia de Dios. La misericordia es un atributo de Dios. Dios es un Dios rico en misericordia. Exodo 34:6-7 Es por su misericordia que no hemos sido consumidos. Nos trae seguridad saber que Dios es un Dios misericordioso. Esto le vivifica al salmista y nos debe vivificar también a nosotros.

Muchas veces cuando observo la vida de aquellos que no conocen al Señor, pienso (y aún digo, “Señor eres muy misericordioso. Yo no soy misericordioso como tu. Ayúdame a ser misericordioso como tu.”) en la gran compasión que Él tiene ya que muchos, o quizás la mayoría viven como ellos quieren. Dios aun así le sigue mostrando misericordia. El deseo de Dios es que nadie perezca sino que todos procedan al arrepentimiento. 2 Pedro 3:9

Su compasión abundante no solo me aviva sino que


B. Su Compasión Abundante me Lleva a ser Fiel a su Verdad vv. 157-158

1. Aun Cuando hay Muchos Perseguidores y Enemigos v. 157

“Muchos son mis perseguidores y mis enemigos, Mas de tus testimonios no me he apartado.”

La palabra “mucha” la usó el salmista para referirse a la misericordia de Dios. Ahora la usa para referirse a sus perseguidores y amigos. Está mostrando que aún así sean muchos sus perseguidores y enemigos, es más grande el Dios en que ha creído. Y por esto, no se ha apartado de la verdad de Dios.

Es fácil ser fiel a Dios cuando todo va bien pero no cuando van mal. Es allí cuando nuestra fe es probada. Hebreos 10:23 nos llama a mantener nuestra fe firme en todo momento.

No solo soy fiel cuando mis enemigos son muchos sino

2. Aun Cuando me Disgustan los Desleales v. 158
“Veía a los prevaricadores, y me disgustaba,
Porque no guardaban tus palabras.”

Es muy probable que este versículo se refiere a los Israelitas que no obedecían al Señor. Mirar Ezequiel 33:30-32 Podríamos decir que para nosotros son aquellos que dicen seguir a Cristo pero no lo hacen.
 A estos el salmista los llama “prevaricadores”, a los rebeldes, a los desleales. Esto le causaba que se “disgustara” o que era repulsivo.

Aquí no hay un disgusto personal porque él era auto justo. Este sentir es porque el amaba la Palabra de Dios y ver como habían en su pueblo personas desleales y rebeldes a la Palabra de Dios le llevaba a un sentir de disgusto pero no porque amo tanto la Palabra de Dios que me causa disgusto cuando alguien no la obedece.

Esto no nos sucede a nosotros. Nos disgusta lo que otros hacen porque no concuerda con lo que a nosotros nos parece. Esto me pasa a mi seguido. Me causa disgusto lo que otros hacen por mis propios prejuicios o porque me estorban en algo que yo quiero hacer.

En todo esto debo recordar que el amor leal de Dios, el amor incambiable debe llevarme a seguir siendo fiel a Él. Esto me da seguridad.

3.  La Palabra Segura de Dios es Amada vv. 159-160

El salmista dice en el vs. 153 que no se ha olvidado de la ley de Dios, pero en el vs. 159 dice que la ama.

A.  Porque está Basada en su Amor Inalterable v. 159

“Mira, oh Jehová, que amo tus mandamientos;
Vivifícame conforme a tu misericordia.”

La ama porque Dios le ha mostrado su amor inalterable e incambiable a través de ella. Nosotros también hemos recibido ese amor. Nosotros le amamos porque el nos amó primero. Este amor vino a través de Cristo. Cristo nos amo tanto que vino, fue crucificado, matado, sepultado y resucitado por Dios Padre para que al creer en Él podamos tener vida eterna. Es cuando creemos por fe en Él que experimentamos el amor de Dios. Y es cuando comenzamos a amar a Dios.

Si tu no has experimentado su amor a través de Cristo, hoy es tu oportunidad. Nada ni nadie te dará este amor que solo El te puede dar.

Amamos la Palabra porque está basada en su amor inalterable y

B. Porque su Distintiva Principal es la Verdad de Dios v. 160a

“La suma de tu palabra es verdad”

La palabra suma quiere decir “la cabeza o “cabecera”.  Esto quiere decir que la Palabra de Dios en su totalidad, en toda su esencia es la verdad de Dios. 
Muchos hoy día están buscando la verdad. La están buscando en los medios de comunicación, en la religión, en libros, y aún en otros. Pero solo la Palabra de Dios contiene toda la esencia de la verdad de Dios. Y por esto es segura. Tu puedes seguir buscando todo lo que quieras para dar significado a tu vida pero solo la Palabra de Dios es segura porque es la verdad de Dios. Es su Palabra.

Nuestro deber es amar la verdad de Dios y amarla es obedecerla como nuestro Señor nos dijo. Amarla es amar a Cristo. Juan 14:15; 21, 24; 15:10
Esto fue lo que Cristo dijo en Mateo 7 cuando habló de los dos fundamentos. Solo la Palabra de Dios puede darnos el fundamento sólido para  nuestra vida.

Rechazarla, desobedecerla es rechazar a Cristo, es invitar que la ruina venga a nuestra vida.

Piensa en tu vida en esta mañana. Si hay caos en tu vida no es por culpa de Dios. Es porque has substituido a Dios por algo o por alguien. Es porque has rechazado la verdad de Dios. Hasta que no creas lo que Él dice en ella y te arrepientas, no podrás encontrar paz.
No solo debemos amarla porque es la principal verdad de Dios sino también:

 C. Porque sus Juicios (declaraciones y decisiones) están Basados en su Justicia Eterna v. 160b
“Y eterno es todo juicio de tu justicia.”

Lo que Dios dice en su Palabra es eterno. Sus juicios son justos eternamente. En los Estados Unidos tenemos la Suprema Corte que decide los casos que afectan a toda la nación. La palabra de la corte es final. Y sin embargo, muchos cosas que ellos dijeron que eran ilegal son legales hoy día porque dependen del juez que esta en la banca determinando el juicio. Así que el juicio de ellos es imperfecto, insegura y temporal.
Pero no es así con Dios. Sus juicios, sus declaraciones y decisiones están basados en su carácter inmutable como Dios justo. Sus juicios son eternos, no cambian. Esto nos da seguridad. No hay capricho en Dios.

Debemos amar su Palabra porque está basada en su amor inalterable, porque es la verdad de Dios y porque sus juicios están basados en su justicia eterna.


La Palabra de Dios. Es segura porque es eterna. Te da confianza porque muestra el amor inalterable de Dios. Te da seguridad porque te vivifica a través de las promesas de Dios; te da seguridad porque Dios es tu abogado y tu pariente cercano. Te da seguridad porque revela la compasión de Dios. Te da seguridad porque es la verdad de Dios que te muestra el gran amor que Cristo tiene para ti. Es segura porque está basada en el carácter justo de Dios. El Dios que ejecutara juicio al final de su plan.
Él te invita a creer en Cristo hoy día. El te quiere dar seguridad eterna.
Creyente, recuerda donde está seguridad. No está en lo temporal, ni en tus planes y deseos. Esta en su Palabra. Arráigate en ella. Obedécela y estarás seguro no importa que venga a tu vida.




La Palabra Segura de Dios - Salmo 119:153-156 - Primera Parte

La Palabra Segura de Dios - Salmo 119:153-156 

Pensemos en lo que muchas veces decimos a otros personas. Nuestra palabra no es segura ya que no cumplimos lo que decimos. Piensa en las cosas que has dicho a otros que vas a hacer.
Soy una persona que me gusta cumplir mi palabra, y me choca cuando alguien me dice que hará algo y no lo hace.

¡Qué diferente es con Dios y su Palabra! El nos da su Palabra segura. Su Palabra es segura porque está arraigada en su carácter inmutable. Los cielos y la tierra pasaran, más su Palabra no pasará. Dios nos asegura todo lo que nos dice en su Palabra. El nos asegura vida a través de su verdad.

Pero parece que nosotros no le creemos. Creemos a todos (que no nos aseguran nada) pero no ha Dios. Pensamos que Dios es un pedante que solo quiere hacernos sufrir, quitarnos lo que queremos, y hacernos infeliz. Lo opuesto es cierto. Dios nos ama como nadie. Dios desea darnos vida. Dios nos ha preparado un destino inimaginable.

Miremos como Dios nos trae seguridad en el Salmo 119:153-159. Esta sección “resh” que corresponde a la letra “r” en nuestro abecedario nos muestra tres maneras en que Dios nos da la seguridad que necesitamos a través de su Palabra. Ya que es SU Palabra, Dios mismo nos da seguridad a través de ella.

Pero como miraremos, esta seguridad está vinculada en como nosotros somos obedientes a ella. Sin la obediencia a ella no podremos tener esta seguridad. Si hay algo que debemos enseñar en el discipulado hoy día es la obediencia a la Palabra de Dios. Obediencia a la Palabra de Dios muestra el señorío de Cristo en nuestra vida. Lucas 6:46 (Luke 6:46)

Esta obediencia a su Palabra nos traerá la seguridad de Dios. Nos ayudará a vivir la vida en este mundo tan inseguro. Solo ella nos ayudará a terminar la carrera de la fe. No podemos hacerlo sin ser obediente a ella.

1.  La Palabra Segura de Dios No es Olvidada vv. 153-155

Como creyentes somos llamados a Cristo a través de la Palabra. El oír viene por la fe y la fe por la Palabra de Dios. Nuestra vida desde ese momento debe ser que cuando oímos la Palabra de Dios debemos obedecerla y no ser oidores olvidadizos.  Santiago 1:22-25. Nuestra fe debe producir obras. Santiago 2:14-15

Cuando hacemos esto,
                             
A. Nos da CONFIANZA en Tiempos Difíciles v. 153
“Mira mi aflicción, y líbrame,
Porque de tu ley no me he olvidado.”

Este “mira” en este versículo usa el lenguaje del éxodo de Egipto cuando Dios miró la aflicción de su pueblo y les salvó. (Éxodo 3:7-9)
El hijo de Dios puede estar seguro, puede tener confianza en tiempos difíciles porque Dios ve su sufrimiento. Dios tiene cuidado de nosotros. 1 Ped. 5:7. Nada puede separarnos de su amor aun cuando las cosas no van bien en nuestra vida. Rom. 8:35-36

Esto nos da seguridad y nos debe llevar a no olvidarnos de su Palabra sino a ser fiel a ella.

B. Nos VIVIFICA en lo que Dios Promete v.154
“Defiende mi causa, y redímeme;
Vivifícame con tu palabra.”

¿Cómo nos vivifica o reaviva? En dos maneras. Nos vivifica o anima mostrándonos dos aspectos de lo que Dios es para nosotros.

1. Dios es Nuestro Abogado v. 154a
“Defiende mi causa”

La palabra “defiende” tiene la idea de un abogado que defiende la causa de otro. El salmista reconoce a Dios como su defensor, su abogado. Recuerda que el salmista no pudo ver a Cristo como su abogado como nosotros, pero sabía que Dios era su defensor.

La bíblia dice que Cristo es nuestro abogado, es nuestro defensor delante del Padre especialmente cuando pecamos. 1 Juan 2:1 (I John 2:1) Esto no nos da la excusa para pecar sino que nos alienta a vivir una vida santa para Él.

Él es también quien intercede por nosotros como lo hacen los abogados. Heb. 7:25 Pero no lo hace por algún interés personal como lo hacen muchas veces los abogados. Lo hace porque sabe lo que es experimentar las luchas contra la maldad. Él se compadece de nosotros y nos invita a acercarnos a Él cada día con confianza. (Hebrews 4:15-16) Esto debe también avivarnos.

La segunda manera en que nos vivifica es entendiendo que

2. Dios es Nuestro Pariente-Redentor v. 154b
“Y redímeme”

Este concepto viene del Antiguo Testamento cuando una mujer perdía su esposo, un pariente más cercano de él tenía que casarse con ella para preservar no solo su linaje sino también para proteger la herencia y posesiones de él. Este es el caso que encontramos en el libro de Rut.
Este libro ilustra lo que Cristo haría por nosotros. El es nuestro pariente-redentor. Él como nuestro Creador vino a rescatarnos del pecado, darnos la vida eterna y restituirnos delante de Dios. Cristo es nuestro hermano, nuestro redentor. Dios es nuestro Padre. ¡Qué privilegio tenemos como hijos suyos! Esto debe avivarnos.

Saber que tiene un Dios que le redime, le rescata, aviva al salmista

¡Cuánto más debe a nosotros vivificarnos el hecho de que Cristo es nuestro Redentor!

Es la Palabra que nos asegura de que tenemos un Dios que nos defiende y nos redime. Esto no es algo automático para todos. El siguiente versículo nos dice que Él,

C. No PROMETE VIDA a los Malos v. 155

“Lejos está de los impíos la salvación, Porque no buscan tus estatutos”

¿Porqué no tienen los malos seguridad de salvación, ya se salvación de su sufrimiento, sus luchas o aun salvación eterna de parte de Dios?

Porque no buscan lo que Dios manda. ¿Porqué no lo hacen? ¿Será porque Dios no quiere?

1. Porque tienen sus ojos ciegos y corazones duros a la verdad de Dios. Y porque están en esta situación no conocen a Cristo.

Cristo nos les ha liberado para que pueda conocerle, seguirle, y desear guardar sus estatutos.
Esto les hace apáticos e indiferentes a la verdad de Dios.

2. Porque activamente buscan sus propios deseos y ponen su confianza en otros o en cosas.

Esto es lo que define nuestra cultura secular. Escucha lo que el Juez  Anthony Kennedy que está por retirarse de la Suprema Corte dijo:
"En el corazón de la libertad está el derecho a definir por uno mismo el concepto de existencia, significado, de el universo, y el misterio de la vida humana."

Esto es exactamente la clase de persona que menciona el salmista. Personas que viven definiéndose por sus propios deseos e inclinaciones. Personas seculares.

Esto lo pude ver en España y aún en Tirana. Al mirar le movimiento en España pude sentir como lo secular, lo de este mundo era lo que buscaban. No hay sueño, y descanso. Noche y día hay gente haciendo algo.

No fue muy diferente en Albania. Este país que es uno de los más pobres en el mundo no se quiere quedar atrás. En el centro, hay mucho entretenimiento todos los días en la noche. Miré como pasaron los partidos en el centro.

Para ellos está lejos la salvación del Señor. Pero no lo saben. Necesitan que nosotros los creyentes les mostremos que necesitan de la salvación del Señor.
Esta seguridad que ellos tienen no es segura. Mira lo que dice Malaquías 7:4-6

Hijo de Dios recuerda de quien viene tu seguridad de salvación. No viene de nadie ni de nada sino de su Palabra segura que nos da confianza en tiempos difíciles y nos asegura de sus promesas como sus hijos. No olvides esto.




El Amor de mi vida - Salmo 119:161-168

En esta sección comienza con las dos letras “shin” que corresponde a las letras “sh” juntas y la letra “sin” que corresponde a la letra “s”.  Los versículos 161-162 y 166 comienzan con la letra “sin” y el resto de los versículos con la letra “shin”.

El salmista nos muestra tres características de una persona que ama la Palabra de Dios.






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La Palabra Segura de Dios - Salmo 119:153-156

Esta sección “resh” que corresponde a la letra “r” en nuestro abecedario nos muestra tres maneras en que Dios nos da la seguridad que necesitamos a través de su Palabra. Ya que es SU Palabra, Dios mismo nos da seguridad a través de ella.









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